14 de febrero de 2015

Santos CIRILO y METODIO. s. IX. Patrones de Europa.

(chk: Cyril a Metodej).
Cirilo: Señorito. Referente al señor.  
Metodio: Artesano, estudioso.

Martirologio Romano: Memoria de los santos Cirilo, monje, y Metodio, obispo, hermanos nacidos en Tesalónica, que fueron enviados a Moravia por el obispo Focio de Constantinopla para predicar la fe cristiana, y allí inventaron signos propios para traducir del griego a la lengua eslava los libros sagrados. En un viaje que hicieron a Roma, Cirilo, que antes se llamaba Constantino, enfermó y, habiendo profesado como monje, descansó en el Señor en este día



Los dos hermanos nacieron en Tesalónica en el seno de una noble familia bizantina. Conocían el eslavo que en aquel tiempo se hablaba en Macedonia, y recibieron una esmeradísima instrucción en Constantinopla donde Cirilo (entonces llamado Constantino) (c.827 - 869), enseñaba en la universidad de Constantinopla, además era bibliotecario del patriarca de Constantinopla, san Ignacio, y recibió el sobrenombre del "el Filósofo". A los 28 años dejó todo y se hizo monje junto con su hermano Metodio. 
Metodio (que se llamaba Miguel) (c.815 - 885), era gobernador o arconte de una provincia del Imperio de Bizancio, poblada por eslavos (tal circustancia le permitió entrar en contacto con la lengua y la cultura de ese pueblo, de los cuales se servirá más tarde en su obra de evangelización). Con 40 años, dejó todos los cargos políticos y se hizo monje en Bitinia, en el monte Olimpo y llegó a ser "hegúmeno" (superior). 
La primera misión que se les confió fue donde los cátaros de Crimea, en una misión mitad religiosa, mitad para asegurar la paz en las fronteras del Imperio. Los cátaros eran mitad judíos mitad musulmanes, parece que la presencia de Cirilo, fue importante en cuanto a la evangelización y la misión política. Allí encontraron las reliquias del papa san Clemente I. 
Luego el príncipe Ratislaw pidió, al emperador Miguel III, sacerdotes que hablaran eslavo, por lo que Cirilo y Metodio se trasladaron a Moravia en el 863. Allí propagaron con rapidez el cristianismo; Cirilo inventó una escritura para el eslavo (aunque el llamado alfabeto cirílico es obra de un discípulo suyo posterior); vertieron los Evangelios a esta lengua y la utilizaron también en la liturgia. No tardaron en chocar con los obispos alemanes por problemas con la liturgia eslava, la cuestión se complica con el cisma de Focio, que fue maestro de Cirilo. Los dos hermanos fueron a Roma para justificarse, ante el papa Adriano II, que los invitó a celebrar en eslavo la liturgia en la Eucaristía celebrada en honor del traslado de las reliquias de san Clemente; de este modo el Pontífice sancionaba su trabajo. En Roma murió Cirilo, con 42 años, después de haber hecho la profesión monástica y tomar el nombre de Cirilo por el que es reconocido. 
Muerto su hermano, Metodio, regresó a sus misiones en Hungría, Checoslovaquia, Polonia, Bulgaria y Rusia; volvió más tarde a Roma donde fue nombrado obispo de Moravia y Panonia, por el papa Adriano II, con sede recuperada en Sirmio, y al mismo tiempo fue nombrado Legado apostólico de los eslavos. Tendrá que seguir luchando con los prelados alemanes, sufrir cautiverio y ver que se prohibía la liturgia eslava, finalmente autorizada por Juan VIII en la carta pontificia "Industriae tuae", del 880, el uso de la lengua eslava en la liturgia preparada por los dos hermanos. Fue un gran controversista y con grandes dotes de humor, se cuenta que discutiendo un día, uno le preguntó: "¿Por qué ha la frente llena de sudor? y él contestó - porque estoy discutiendo con un idiota". 
Las dificultades no desaparecieron, y Roma, para buscar la concordia, asignó como auxiliar de Metodio a un alemán, Wiching, que le creó muchas dificultades, de manera, que a la muerte de Metodio, este alemán, convenció al papa Esteban V, de que Metodio había sido condenado por su antecesor Juan VIII. El caso es que los discípulos de éste fueron perseguidos y la liturgia en eslavo proscrita en Centroeuropa. Afortunadamente los expulsados se reunieron en los dominios de Boris de Bulgaria, de hecho que en esta nación se afianzará la obra de los hermanos, gracias a la labor de los discípulos de Metodio: santos Goradz, Nahúm, Saba, Angelario y Clemente de Ochrida. Murió a los 75 años. 
La fiesta de los santos Cirilo y Metodio, que se había celebrado desde antiguo en la región donde trabajaron, fue extendida a toda la Iglesia de Occidente por el Papa León XIII en 1880. Por tratarse de dos orientales que trabajaron en estrecha colaboración con la Santa Sede, se los considera como patronos especiales de la unidad de la Iglesia y de las obras que se dedican a promover la unión con las Iglesias eslavas disidentes. Los católicos checos, eslavos y croatas, así como los servios y búlgaros ortodoxos, les profesan especial devoción. Los nombres de los dos santos aparecen en la preparación de la misa bizantina de rito eslavo. Juan Pablo II, con la carta apostólica «Egregiae virtutis», del 31 de diciembre de 1980, los proclamó -junto con san Benito de Nursia- patronos de Europa, y presentó sus figuras de evangelizadores por medio de la encíclica «Slavorum apostoli», de 1985. FIESTA.  

San VALENTÍN. (175 - d.273).

(Valia)
Bueno. Sano. Robusto. Que vale

Martirologio Romano: En Roma, en la vía Flaminia, cerca del puente Milvio, san Valentín, mártir

Se dice que era presbítero y médico en Roma. Valentín era famoso en toda la ciudad. Esta fama hizo que el emperador Claudio II se interesara por él. Y que a punto estuvo, después de varias entrevistas, de hacerse cristiano. Los magistrados romanos no podían permitir semejante cambio. De forma que Valentín se vio envuelto en la acción de los tribunales romanos, por su condición de cristiano.
Según la leyenda, en las cárceles socorrió a los cristianos y confesores que habían afirmado su fe delante de los jueces. Se le dio en custodia a un noble romano, Arterio, que tenía una hija ciega a la cual curó. La familia de ésta quiso pedir el bautismo, pero con esto, Valentín entró con más violencia en la rueda de su desgracia. La familia de Arterio se convirtió al cristianismo y murieron mártires, junto con el persa san Mario y su familia. Valentín, estuvo algunos días en la cárcel. Fue apaleado muchas veces. Al fin fue degollado fuera de la ciudad. Los cristianos enterraron su cuerpo cerca de la misma puerta Flaminia donde había muerto. 
Otra leyenda dice: san Valentín, nació en Terni. Valentín dedicó toda su vida a la comunidad cristiana que se había formado en la ciudad a cien kilómetros de Roma, donde arreciaba la persecución contra los seguidores de Jesús.
El eco de los clamorosos milagros realizados por el santo, llegó hasta Roma y se difundió pronto por todo el imperio, así fue que el Papa Feliciano lo consagró primer obispo de la ciudad de Terni, y todavía hoy conserva los restos mortales. Su nombre está siempre unido al amor por un episodio que en aquel tiempo fue muy clamoroso: cuenta la leyenda de hecho que san Valentín fue el primer religioso que celebró la unión entre un legionario pagano y una joven cristiana. Seguidamente fueron muchos que desearon su bendición. Durante el período de su vida pastoral fue muy amado por la población umbra. Durante las persecuciones cristianas san Valentín fue encarcelado y azotado en la vía Flaminia, lejos de la ciudad para evitar tumultos y represalias de parte de los fieles, y fue entonces martirizado. Al cuerpo del obispo de Terni se le dio sepultura apresuradamente en un cementerio al aire libre, colocado en la segunda milla de la vía Flaminia, a poca distancia de Roma. Más tarde tres fieles discípulos lograron desenterrar el cuerpo y llevarlo de nuevo a  la ciudad, llamada entonces Interamna para asignarle una sepultura digna para su veneración. 
Hay muchos hagiógrafos y calendarios que intenta desdoblar al presbítero del obispo, y hacer dos santos distintos, uno natural de Roma y el segundo natural de Terni, cuando en realidad, son dos leyendas distintas para un mismo santo.
La razón por la que es patrón de los enamorados no se sabe con certeza, aunque se dice que Claudio II había promulgado un edicto en el que prohibía contraer matrimonio a los soldados jóvenes para que así, libres de ataduras sentimentales, pudiesen dedicarse mejor a la guerra. Contraviniendo la orden, Valentín casó en secreto a cuantas parejas acudían a él. También se afirma que por estas fechas, en Europa central, era época de celo de las aves, y los novios se hacían regalos. Desde 1969 su culto se ha limitado a los calendarios locales.

San NOSTRIANO DE NÁPOLES. M. c. 450.


Cordero.

Martirologio Romano: Conmemoración de san Nostriano, obispo de Nápoles.

Es el XVº obispo de Nápoles, combatió al arrianismo y el pelagianismo en su diócesis. En octubre del 439, cayó Cartago en manos de los vándalos del rey Genserico, un gran multitud de eclesiásticos tuvieron que dejar su tierra natal. Despojados de todo, fueron embarcados en unas naves muy precarias, algunos consiguieron salvarse milagrósamente y llegar a la costa napolitana, fueron acogidos con gran afecto por el obispo Nostriano. Entre estos estaban santos Gaudosio de Nápoles y Quodvultdeus de Cartago. Éste último, mientras estuvo en Nápoles, desenmascaró la propaganda  que del pelagianismo hacía “no lejos de Nápoles” Floro, embebido también de maniqueismo. Parece que se había establecido en Miseno, ya que predicaba y practicaba cosas ilícitas atribuyéndose el mérito y la virtud de san Sosio de Puzzuoli, un mártir venerado en aquella ciudad. En el libro “De promissionibus et praedictionibus Dei”, que se atribuye a san Quodvultdeus, se narra que el obispo de Nápoles mandó al sacerdote Herio y otros clérigos a arrestar y expulsar al predicador herético. 
Nostriano construyó las termas para uso del clero y de los fieles. Murió después de 16 años de episcopado en Nápoles y fue sepultado en la iglesia de San Gennaro all'Olmo.
La fiesta fue trasladada al 14 de febrero, sólo para la diócesis de Nápoles, con decreto de la Sagrada Congregación de Ritos del 2 de mayo de 1878, confirmándose así el culto por León XIII, y recientemente fue inscripto en el Martirologio Romano. Aunque en el decreto de confirmación de culto -como en muchos otros casos- se aceptó su título tradicional de santo, el rango de celebración corresponde a beato, es decir, a culto puramente local.

San AUXENCIO DE BITINIA. M. c. 470.

(Aujencio)
Creciente, que se desarrolla

Martirologio Romano: En el monte Scopa, en Bitinia, san Auxencio, presbítero y archimandrita, el cual, aprovechando la cátedra que ocupaba, defendió la fe de Calcedonia con la voz de sus virtudes.

Nació en Siria de padres persas; fue el hijo de una persona llamada Addas. En su juventud, fue uno de los guardias ecuestres de Todosio el Joven, pero sus deberes militares, que cumplía con entera fidelidad, no le impedían hacer del servicio de Dios su principal interés. Todo su tiempo libre lo pasaba en soledad y oración, y frecuentemente visitaba a los santos reclusos que ocupaban ermitas en los alrededores para pedirles albergue y poder pasar la noche con ellos, haciendo ejercicios penitenciales y cantando alabanzas a Dios. 
Finalmente, el deseo de una mayor perfección, o el temor de la vanagloria, lo indujeron a adoptar la vida eremítica. Formó su albergue en la montaña desierta de Oxia, a sólo doce kilómetros de Constantinopla, pero al otro lado del Helesponto, en Bitinia. Allí parece ser que fue muy consultado y que ejerció considerable influencia, debido a su fama de santidad. 
Cuando se reunió en Calcedonia el IVº Concilio Ecuménico para condenar la herejía eutiquiana, Auxencio fue llamado por el emperador Marciano, no como algunos de los biógrafos del santo sugieren, por su gran sabiduría, sino porque se sospechaba de sus simpatías con la doctrina de Eutiquio. Auxencio se justificó de la acusación que le hacían. Cuando estuvo de nuevo en libertad, no regresó a Oxia, sino que eligió otra celda más cercana a Calcedonia, en la montaña de Skopas, que luego se llamó monte San Auxencio, donde fue presbítero y archimandrita. Allí permaneció, entregado a una vida de gran austeridad, instruyendo a los discípulos que acudían a él, hasta su muerte.
El historiador Sozomeno escribió todavía en vida del santo sobre la fe constante de Auxencio, así como sobre la pureza de su vida y su intimidad con fervorosos ascetas. Entre los que buscaban dirigirse por él, en sus últimos años, hubo algunas mujeres. Estas formaron una comunidad y vivían juntas al pie del Monte Skopas. Se les conocía como las Trichinarae “las del hábito de crin”. Fueron ellas las que, después de una larga contienda, lograron obtener la posesión de sus restos mortales, que guardaron como reliquia en la iglesia de su convento.

San ANTONINO DE SORRENTO. M. 830.

Aquel que está entre los santos.

Martirologio Romano: En Sorrento, de la Campania, san Antonino, abad, que al ser destruido su monasterio por los lombardos se refugió en la soledad.

Parece que nació en Picenum, en el distrito de Ancona en el sur de Italia, y que entró todavía joven a un monasterio que estaba bajo el gobierno de Montecasino, pero no en el mismo Montecasino, como algunos escritores han supuesto erróneamente. Los saqueos del duque Sico de Benevento lo obligaron a abandonar su convento; entonces se fue a Castellamare, cerca de Sorrento, junto al obispo san Catelo, quien lo recibió muy cordialmente y con quien pronto tuvo íntima amistad. Trabajaron juntos, y cuando san Catelo se retiró a llevar por un tiempo vida solitaria en la cima de una montaña aislada, le confió a Antonino el cuidado de su diócesis. 
Sin embargo, pronto Antonino siguió a su amigo a la vida aislada. Los dos tuvieron una visión de san Miguel y esto los llevó después a construir allí un oratorio dedicado al arcángel. Catelo tuvo que volver a su diócesis porque lo acusaban de descuidarla; poco después, se le llamó a Roma y fue puesto en prisión por una falsa acusación. Antonino continuó viviendo en su cumbre, desde donde dominaba una extensa vista de mar y tierra; este picacho llevaba el nombre de Monte Angelo, y pronto se volvió un lugar favorito de las peregrinaciones. 
Después de un tiempo, los habitantes de Sorrento le suplicaron que viniera a vivir entre ellos, pues su obispo estaba en prisión y pensaban que Antonino sería su ayuda y sostén. Por lo tanto, abandonó su vida solitaria y entró al monasterio de San Agripino, que regía el abad Bonifacio. A la muerte de éste le sucedió como abad, y todos quedaron admirados de la santidad de este hombre, por su caridad hacia todos. Cuando estaba en su lecho de muerte, parece que pidió que no lo sepultaran ni dentro, ni fuera de la muralla de la ciudad. De acuerdo con esto, sus monjes decidieron enterrarlo en la misma muralla. Murió en Sorrento de donde es patrón. 

San JUAN BAUTISTA DE LA CONCEPCIÓN GARCÍA. (1561-1613).

(Juan García).
Dios es misericordioso. El que está en gracia de Dios. Admirable.

Martirologio Romano: En Córdoba, en España, san Juan Bautista de la Concepción García, presbítero de la Orden de la Santísima Trinidad, que habiendo iniciado la renovación de su Orden, la culminó con gran esfuerzo, en medio de dificultades y persecuciones.

Nació en Almodóvar del Campo (Ciudad Real) en el seno de una familia muy religiosa. Tuvo contactos con los carmelitas descalzos en su pueblo. Santa Teresa de Jesús viéndole de niño profetizó: "será santo, conquistador de muchas almas y reformador de una grande cosa que se verá". Desde su infancia se dedicó a hacer grandes penitencias físicas, y por ello fue recriminado por su familia, pero curó milagrosamente de una parálisis que le habían dejado tantas mortificaciones. Tuvo una gran devoción mariana. 
Ingresó en los trinitarios de Toledo interpretando la voluntad de María en 1580. Durante su noviciado convivió con religiosos de santa vida como san Simón de Rojas y los futuros mártires Bernardo Monroy y Juan de Palacios. Tenía una gran formación intelectual, adquirida en las universidades de Baeza, Toledo y Alcalá de Henares; en la Orden le conocían como “el teólogo”, por su elocuencia y capacidad persuasiva. Fue un gran predicador. Se dedicó al cuidado de pobres y enfermos y continuó con sus severas penitencias que le dejaron secuelas físicas. Fue traslado a Sevilla, donde continuó con su predicación y atendiendo a los apestados de la epidemia de 1560.
Este período no estuvo exento de sombras, ya que se dejó influir por “la tiranía de los cumplimientos del mundo”. Entre tales sombras incluye algunas flaquezas naturales debidos a su naturaleza colérica: reacciones bruscas y palabras de impaciencia, juicios severos con poca advertencia. Después de 17 años de vida religiosa, en Sevilla, tuvo una impresión religiosa que debía cambiar de vida y se entregó: “Señor, me haré reformador en Valdepeñas”. Llegó a Valdepeñas descalzo, abandonó amistades y su mundanidad: “más quiero la honra y la gloria de Dios que todos los tesoros del mundo”. Como superior del monasterio de Valdepeñas introdujo la reforma en el 1597. Cambió su nombre por el de Juan Bautista de la Concepción.
La reforma llamada "de los Trinitarios descalzos" fue aprobada por Roma, donde fue en 1598, y por esta causa, Juan Bautista tuvo que soportar la fuerte oposición de los "no reformados", de manera que le acosaron fortísimas tentaciones de los propios pecados pasados, dudas de fe. Tuvo contactos con santa María Magdalena de Pazzi que le animó. Abandonado por sus colaboradores y perseguido por los “no reformados”, tuvo momentos de vacilación vocacional. Le salvó su rendida sumisión a la voluntad de Dios. Se le ofreció la posibilidad de ingresar en los carmelitas descalzos y decidió seguir con su obra reformadora. Su opción fue radical, y por ello fue apaleado y encarcelado por los calzados, injuriado y traicionado por sus propios hijos; cuando murió en Córdoba, 34 conventos había adoptado la nueva regla o modo de vida. Tuvo dones taumatúrgicos reconocidos en vida. Escribió: "La llaga de amor". "El conocimiento interior sobrenatural". "Diálogos entre Dios y un alma afligida". "El reconocimiento interior". "Algunas penas que afligen al justo en el camino de la perfección". "La presencia de Dios". Fue canonizado por Pablo VI el 25 de mayo de 1975.

Beato VICENTE VILAR DAVID. (1889-1937).

El que vence.

Martirologio Romano: En Valencia, también en España, beato Vicente Vilar David, mártir, que durante la persecución contra la religión acogió en su casa a sacerdotes y religiosos y prefirió morir antes que renegar de la fe

Natural de Manises (Valencia). Se educó con los escolapios de Valencia. Estudió ingeniería industrial en Barcelona, y aquí, dirigido espiritualmente por un jesuita, realizó muchas obras de apostolado y sociales. Volvió a Manises y trabajó en una empresa familiar de cerámica. En 1922, se casó con Isabel Rodes Reig. Desde entonces, se dedicaron ambos al apostolado en Manises. 
Al morir su padre y terminados sus estudios fue nombrado director de la empresa de cerámica, llamada “Hijos de Justo Vilar”. Aquí ejerció una gran labor social, llegando a acuerdos ante las desavenencias, poniendo como principio la paz. Fue catequista de su parroquia y miembro de varias asociaciones eucarísticas y fue un colaborador incondicional con su párroco. En 1923, al producirse el golpe de Estado de Primo de Rivera, se le pidió que se ocupara la viceprisidencia del ayuntamiento, y aceptó pensando que era un servicio público que realizaba, e hizo todo el bien que pudo. No creía que la lucha de clases fuera el motor del progreso, sino más bien el diálogo entre patronos y obreros; por ello recibió muchas críticas e incomprensiones, pero también algunos apoyos.
Al llegar la República, como cristiano, defendió a la Iglesia y por ello promovió la fundación del Patronato de Acción Social que se propuso conservar la educación católica en medio de la imprensionante antirreligiosa. Cuando se inició la guerra civil, albergó a algunos sacerdotes y religiosos en su casa, para preservalos de la matanza, y junto a su párroco salvó los objetos religiosos de valor antes de que las turbas incendiaran la parroquia de Manises en 1936. 
Fue detenido en 1937, y ante el tribunal defendió su condición de católico, afirmando que éste era el título más grande que tenía; y aunque algunos obreros quisieron salvarlos, les pidió que no lo hiciera, lo mataron en una calle de Manises de varios disparos, después de perdonar a sus asesinos. Sus restos se conservan en la iglesia parroqual de San Juan Bautista de Manises. Es el primer seglar mártir beatificado de la Guerra Civil española. Fue beatificado por san Juan Pablo II el 1 de octubre de 1995.

OTROS SANTOS DEL DÍA



San Eleucadio de Rávena. M. 112. 
Difunto. Blanco
Martirologio Romano: En Rávena, de la Flaminia, san Eleucadio, obispo.
Griego de nacimiento, y fue educado en el conocimiento de la filosofía platónica. Lo convirtió san Apolinar de Rávena. Obispo de Rávena, sucediendo a san Aderito. Elegido obispo, continuó la obra de los primeros apóstoles de Ravena. 
Su muerte ocurrió un día 14 de febrero, y tradicionalmente se indica como año el 112, aunque la cronología no es segura. Fue inhumado fuera de los muros de Ravena, en un lugar en donde más tarde se construyó una iglesia. Después, se trasladó su cuerpo a la iglesia de San Miguel, en Pavía. 

teatro de Alejandría
San Basiano y 8 compañeros. s. III. 
(Basa, Bassa, Basso, Baso)
Bajo, gordo.
Martirologio Romano: En Alejandría de Egipto, conmemoración de los santos mártires Basiano, Tonión, Proto y Lucio, que fueron arrojados al mar; Cirión, presbítero, Agatón, exorcista, y Moisés, que quemaron vivos; y Dionisio y Ammonio, que entraron en la gloria eterna tras ser decapitados.
El estudio de Abel Della Costa nos informa que la noticia del Martirologio tal como la tenemos ahora proviene de una inscripción del “Martirologio Jeronimiano” (s. VI) que no da ninguna referencia acerca de en qué persecución dieron su testimonio estos mártires, y el carácter legendario de la passio mencionada impide llegar a una conclusión histórica inequívoca. Por eso nuestro Martirologio Romano actual les ha quitado las referencias de detalle que le había agregado el Cardenal Baronio en el primero Martirologio Romano (como por ejemplo que Bassiano era lector, referencias que por otra parte no se sabe de dónde las tomó), y queda como un grupo de mártires de fecha desconocida, en una ciudad, Alejandría, que pasó por todas las persecusiones, así que podrían ser de la de Decio (hacia el 250), como de la Diocleciano (hacia el 303), o cualquiera de las otras menores. No se sabe la fuente que usó el “Jeronimiano”, pero es un testigo lo suficientemente antiguo y riguroso como para considerar que la poca información que nos brinda es histórica.

Santa Fortunata. (c.182 - 200). 
Dichosa
Se sabe que fue una adolescente convertida al cristianismo y que vivía en Palestrina, cerca de Roma, su ciudad natal. Fue capturada por las milicias romanas, fue torturada y al final murió mártir.
Su cuerpo con un paño bañado en su sangre, fue enterrado en las catacumbas de Santa Ciriaca de Roma, donde permaneció hasta el 1790 que fueron consignadas al párroco de Baucina (Palermo, Sicilia) de donde es copatrona. Aunque no aparece en el actual Martirologio Romano, su nombre aparecía en ediciones precedente.

San Vital de Spoleto. s. I - III. 
Que tiene vida
Martirologio Romano: En la ciudad de Spoleto, en la Umbría, san Vital, mártir, santificado por la fe conservada y su imitación de Cristo.
Probablemente mártir en Roma, en la vía Ardeatina, a las afueras de Roma; no se sabe nada de él. Otros autores piensan que Vidal murió mártir en Spoleto. 
No hay noticias de detalle sobre este mártir. Solamente la inscripción en una lápida puesta por el obispo de Spoleto, Spes, cuando en las últimas décadas de ese siglo se encontró el sepulcro en el pueblo de Terzo della Pieve, distante unso 15 km de Spoleto. El mismo obispo dedicó al mártir un altar. En el «Sacramentario Gelasiano» antiguo y en la propia inscripción de la lápida san Vital es vinculado a la celebración de los santos Valentín y Felícula, por lo que se lo inscribe el 14 de febrero. Delehaye, interpretando la frase «imitación de Cristo» inscripta en la lápida, supone que el mártir murió crucificado.
cementerio de Pretextato

San Zenón de Roma. s. I - III. 
De mucho vigor. Divino. Sacerdote
Martirologio Romano: En Roma, en el cementerio de Pretextato, en la vía Apia, san Zenón, mártir.
Mártir en Roma. Antiguamente se le unía a san Vidal celebrado este día.  

Santa Alejandra de Egipto "la Reclusa". s. IV. (iglesia copta). 
Protectora de los hombres
Las noticias que tenemos de ella nos han llegado primero por Paladio de Elenopoli en la “Historia Lausiaca” y después por la matrona romana Melania la Joven, la cual parece que visitó a la reclusa.  
Nació en Alejandría de Egipto. En los primeros siglos de la Iglesia, hubo por parte de muchos cristianos la necesidad de hacer penitencia, para ello se retiraron a lugares aislados y practicaron penitencias o formas de hacerlas, que hoy en día podrían parecernos absurdas e inconcebibles. La santa que nos ocupa se hizo emparedar dejando una pequeña abertura para la introducción de la comida, confiada a las almas generosas, con ayunos más o menos forzosos. 
Desde su juventud se había enclaustrado es una especie de tumba, y vivió en estas condiciones durante diez años hasta su muerte, parece que era muy joven, presumiblemente tendría unos 30 años. Melania que la visitaba, nos dice que había dejado el mundo para huir de las tentaciones de un hombre, creyendo así salvar ambas almas.
El tiempo lo pasaba orando, trabajando y meditando sobre la vida de los patriarcas, profetas y mártires. En un Sinaxario se lee que Melania la Joven, le procuraba la comida y la bebida, vestida con una capucha de sierva y en esta obra de misericordia la extendía a otros penitentes del lugar. 

Santos Modestino, Florentino y Flaviano. M. 311. 
Modestino nació en Antioquía en el seno de una noble familia en el 245. En el 302 fue consagrado obispo de la ciudad y patriarca de la región de Antioquía. Con la persecución de Diocleciano (año 303), se retiró a un eremo en el monte Silpio, en el 310 regresó a su sede patriarcal. Predicó el Evangelio de Cristo y realizó numerosos milagros y curaciones. Fue arrestado y torturado, fue liberado de la prisión por sus fieles de la diócesis.
Junto con sus colaboradores el presbítero Florentino y el diácono Flaviano se marchó para Italia. Llegaron por vía marítima a Lorcri (en Calabría) donde predicaron el Evangelio, fueron arrestados y encarcelados en Sibari, según la tradición allí fueron liberados por el arcángel san Miguel.
Por mar llegaron a Puzuoli o Cuma y de aquí marcharon a Irpina, en el lugar de “Abellinum”donde predicaron las enseñanzas de Cristo. Modestino volvió a realizar milagros y curaciones. Aquí fueron arrestados, encarcelados y procesados por un enviado del emperador Majencio, y llevados luego al Pretorio donde sufrieron el martirio. 
Sus cuerpos fueron recogidos por los cristianos avellinates y sepultados. En 1220 fueron nombrados patronos principales de la ciudad y de la diócesis de Avellino por el obispo Ruggiero. El culto es local.

Santa Camila de Auxerre. M. c. 437. Virgen. (Ver) 3 de Marzo.