Martirologio Romano: En el territorio de Vexin en la Galia lugdonense, hoy Francia, conmemoración de los santos Nicasio, Quirino, Scubícolo y Piencia, mártires.
Nicasio era obispo de Rouen, Quirino sacerdote y Scubículo diácono, según el relato legendario de un monje de la abadía de San Audoeno evangelizaron la región de Vexin; fueron decapitados durante el imperio de Domiciano. A este grupo se le añadió la joven Piencia.
San Santino de Verdún. M. c. 300.
Martirologio Romano: En Verdún, también en la Galia, san Santino, obispo, que, según se cree, fue el primero en predicar el Evangelio en esta ciudad.
Se piensa que fue discípulo de san Dionisio de París y que fue el primer obispo de Verdun y de Meaux.
Santos Táraco, Andrónico y Probo. M. 304.
Martirologio Romano: En Ainvarza, hoy Turquía, santos Táraco, Probo y Andrónico, mártires, que durante la persecución del emperador Diocleciano entregaron su vida por testimonar la fe en Cristo.
Mártires en Tarso de Cilicia, durante la persecución de Diocleciano. Táraco nació en Claudiópolis de Isauria. Era soldado pero "por ser cristiano, me decidí a pasar a la vida de paisano". Tenía 60 años cuando fue interrogado por primera vez. "Yo soy cristiano. En cuanto a esa gloria que dices, yo la deseo para ti y para tus emperadores, y que, dejando su impenetrable ceguera, vengáis a mejores y más firmes pensamientos y seáis vivificados por el verdadero Dios". Andrónico era un joven de Éfeso de buena familia y Probo un ciudadano romano de Panfilia. Después de sufrir crueles torturas fueron degollados.
Cenobio |
San Sármatas. M. 357.
Martirologio Romano: Conmemoración de san Sármata, abad en la Tebaida, que, siendo discípulo de san Antonio, recibió la muerte a manos de los sarracenos.
Discípulo egipcio de san Antonio Abad; fue asesinado en su monasterio por un grupo de bandidos beduinos.
San Fermín de Uzés. (c.511 - 553).
Martirologio Romano: En Uzés, de la Galia Narbonense, san Fermín, obispo, discípulo de san Cesáreo de Arlés, que enseñó a su pueblo el camino de la verdad.
Natural de Narbona fue educado por su tío el obispo de Uzés (Galia Narbonese), san Ferreol, a quién se sucedió a los 22 años. Fue discípulo y amigo de san Cesáreo de Arles y, suscribió con otros obispos la "Regula santarum virginum" y escribió el primer libro de su "Vita" con Cipriano de Toulon y con otros autores. Firmó las actas de el concilio de Orleans (541-549) y del de París (551).
Vita de san Máximo el Confesor |
San Anastasio "el Apocrisiario". M. 666.
Martirologio Romano: Cerca de la fortaleza de Schemaris, en las montañas del Cáucaso, muerte de san Anastasio, presbítero, apocrisiario de la Iglesia Romana y compañero en la confesión de la fe católica y en el destierro de san Máximo el Confesor, que entregó su espíritu a Dios mientras pronunciaba en la celebración de la santa Sinaxis: “Lo santo para los santos”.
Anastasio era presbítero y «apocrisiario» (es decir, el legado, en este caso, papal) que junto san Anastasio, llamado «el abad» (aunque parece que sólo fue monje), fueron dos compañeros de lucha y de prisión de san Máximo «el Confesor». Como él, y junto con él, estaban los dos Anastasio presos en Perberis, en Tracia, por defender la fe ortodoxa frente al monotelismo profesado por el emperador (el monotelismo afirma que en Cristo hay sólo voluntad divina, lo que es una forma solapada de negar su auténtica humanidad).
No llegaron ninguno de los tres a morir mártires, sino que fueron liberados y pudieron volver al monasterio en el Cáucaso; pero los malos tratos recibidos en defensa de la fe les dan el título de «confesores».
San Eufredo. s. VII.
Monje benedictino en la diócesis de Asti.
Se trata de una abreviación del nombre de Teofredo, abad benedictino de Caméry, ejecutado probablemente por los sarracenos en el 732. La memoria de Teofredo se perdió y se comenzó hablar de Eufredo, mártir piamontés durante la invasión sarracena. Según estas “tradiciones” era originario de Cherasco. En otros textos se dice que fue mártir de la legión tebana, confundiéndose con san Chiaffredo.
Martirologio Romano: En Lier, de Brabante, san Gumaro, que era soldado, pero, devoto de Dios, con sus bienes construyó un oratorio, donde a su muerte fue enterrado.
Nació en Emblehem (Amberes). Cortesano del rey Pipino, se casó con una mujer de carácter insoportable y molesto. Separado de su mujer, por una desdichada campaña militar de nueve años, tuvo que batirse en retirada de su propio hogar, y resarcir a todos sus súbditos de los maltratos de su mujer, que fue, durante su ausencia, una déspota. Se retiró y vivió en santidad como recluso en una celda de las proximidades de Nivesdonck (Ledo). Fundó el monasterio de Lier con sus propios bienes. La actual ciudad flamenca de Lier, Bravante, surgió alrededor de su eremitorio.
Martirologio Romano: En Gniezno, ciudad de Polonia, san Gaudencio o Radzim, obispo, que hermano, según la carne y según el espíritu, de san Adalberto, obispo de Praga, compañero fiel suyo en los trabajos, testigo de su martirio, padeciendo también encarcelamientos.
Fue monje con su hermano san Adalberto de Praga, en la abadía benedictina de San Alejo en Roma. Juntos marcharon a Prusia, para evangelizar la región. Salió indemne de la masacre en la que su hermano murió y en la que él sufrió la cárcel. En el 1000, fue nombrado por el emperador Otón III, obispo de Gnesen (Polonia).
San Pedro Le Tuy. (1763-1833).
Martirologio Romano: En Hanoi, de Tonquín, san Pedro Le Tuy, presbítero y mártir, que, por su fe en Cristo, fue degollado en tiempo del emperador Minh Mang.
Nació en Banh-So (Vietnam). Estudió en el seminario de Vinh-Tri y ordenado sacerdote ejerció su ministerio con verdadero celo y dedicación, primero como coadjutor en las parroquias de Dong-Thanh y de Chan-Loc, para luego fue párroco en Nam-Duong, donde estuvo tres años.
Estaba en el pueblo de Thanh-Trai impartiendo los sacramentos a un enfermo, cuando fue encarcelado por la delación de un escribano. Los cristianos intentaron liberarlo, pero no lo consiguieron, por lo cual lo enviaron a Hanoi. Aquí estuvo recluido cargado con cangas. Estuvo así tres meses y fue admirado por todos por su paciencia y mansedumbre. Se le dio la oportunidad de renunciar a su sacerdocio, pero él se negó y se comunicó al rey Minh-Menh, que ordenó que lo decapitaran, siendo así su primera víctima. Sus restos se encuentran en Seminario de Misiones Extranjeras de París. Fue canonizado el 19 de junio de 1988 por el papa Juan Pablo II junto con los 117 mártires de Vietnam.
Ángel Ramos Velázquez. Beato. (1876-1936).
Martirologio Romano: En Barcelona, también en España, beato Ángel Ramos Velázquez, religioso de la Sociedad Salesiana y mártir, que libró el buen combate de la fe en tiempo de persecución.
Natural de Sevilla. A sus 15 años se sintió atraído por el ambiente de las Escuelas de Sarriá, de regreso de una peregrinación a Roma. Primero fue colaborador de los salesianos, en las Escuelas profesionales de Barcelona-Sarria en 1894, atraído por el beato Felipe Rinaldi. Allí mismo profesa seis años después, en 1897. Artista del pincel y del teatro, su noble personalidad prestigia la Escuela y moldea en la virtud al alumnado. Alegre, piadoso, sacrificado, humilde y muy trabajador, supo poner sus cualidades de artista al servicio de los fines de la congregación. Coadjutor salesiano de la comunidad de Sarriá en Barcelona.
Cuando llegó la revolución de julio de 1936 buscó refugio en varias pensiones, pero un antiguo alumno lo vio por la calle y lo denunció. El religioso le dijo al denunciante que si le había hecho algún daño, y el joven le dijo que se lo habían hecho otros y que él pagaría por ellos. El religioso le dijo que deseaba que Dios lo perdonara como lo perdonaba él. Seguidamente se lo llevaron y ya no se supo más de él. Era el 11 de octubre de 1936. Fue beatificado el 11 de marzo de 2001 por san Juan Pablo II en el grupo de 233 mártires de la persecución de Valencia.
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